Si has sufrido un accidente de trabajo en los últimos 30 días, tu mejor defensa es contactar a un abogado hoy mismo. No dejes pasar un día más. Si te pasas del tiempo requerido por la ley, podrías perder tu caso.
La compañía de seguro de tu trabajo sabe cómo proteger sus propios intereses y va a tratar de no pagarte nada o lo menos posible después de tu accidente.